The pesetor!
Llevo unos dĆas teniendo encuentros en la tercera fase con taxistas. Ya la semana pasada me tocó una tĆa taxista, que me querĆa timar en mi camino de vuelta a la patchcueva. Se metió por callejuelas y recovecos, e iba todo el camino a 10 por hora. Cuando lleguĆ© cerca de mi casa y vi que el taxĆmetro estaba empezando a babear como el perro de Pavlov pensando en mi sueldo, le dije a la mujercilla que no tenĆa mĆ”s que 10 euros y que si no se daba prisa, tendrĆa que bajarme antes de llegar a mi casa. La taxista pasando de mi culo (el trayecto que hice me cuesta en condiciones normales 8 euros) me dejó justo donde apuƱalan a gente las mafias de mi barrio, a una distancia prudencial de la patchcueva, pero injustamente depuĆ©s de pagarle mogollón.
Pues bien, ayer me pillé otro taxi. Según entro, llevaba puesto el raggeton mix (según él me dijo, no se lo estaba inventando). El taxista, que llevaba unas pintas de chandalero-metalero-poligonero, me contó que era su primera semana (rematando la frase con un qué pasa Neeeeen que hizo que se me pusieran los pelos como escarpias). Arrancó haciendo rueda y desde ese momento, ya ningun semÔforo le detuvo y ningún adelantamiento le hizo encender su intermitente. Todo un lujo, vamos.
LleguƩ a casa entera, pero desde este momento os digo que casi prefiero que me toque un taxista de esos que te cuentan su vida. O de los que son fachillas y te cuentan que Polanco estƔ organizando la tercera guerra mundial. Pero chandaleros nunca mais. Por el bien de mi seguridad.
Por cierto, me estƔis dejando fatal. Ya estƔis entrando todos en el blog de Niprot y escribiendo un trozo de la historia. Venga, que no se diga.
0 han mejorado su vida sexual:
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