Gremlins violentos
Iba yo esta maƱana en el metro cuando se han montado a mi lado un padre y dos niƱos de una edad indefinida, pero como eran mĆ”s bajitos que yo, me he dicho a mĆ misma que no tendrĆan mĆ”s de 8 o 9 aƱos. Uno de ellos ha empezado a meterle de leches al padre, con toda la fuerza que tenĆa. Y el padre asĆ, con un hilillo de voz "hijo, a papĆ” no se le pega". Yo lo he flipao.
Porque sĆ, los niƱos (de ahora en adelante gremlins) de mi generación eran violentos. Pero yo jamĆ”s he visto que ninguno maltratara a sus padres, por lo menos entre mis amigos.Vale, quiĆ©n no le ha escondido alguna vez la cartera su padre? ¿O quiĆ©n no ha dicho que estaba en un sitio, para luego, por ejemplo, irse a otro paĆs a ver un concierto?
Yo no echo la culpa de esta violencia a la tele, porque evidentemente si hay alguien que crea que sólo viendo la tele vas a poder influir en lo violento que sea una persona, evidentemente estĆ” simplificando mucho. Porque la mitad de los que leeis esto os habĆ©is criado viendo los Caballeros del ZoodĆaco y hasta donde yo sĆ©, a ninguno os ha dado por intentar invertir el flujo de una cascada, como el caballero del Dragón (que es el favorito de la Geller, por cierto).
Y si llega alguno y te mete una mitra, encima tienes que pedirle disculpas al padre por haber invadido el espacio de su gremlin (vĆ©ase la viƱeta superior). Pues nada, que no entiendo a los gremlins de ahora, que son unos violentos. Si es que ni siquiera llaman calcamonĆas a las calcamonĆas. Las llaman tatoos!
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