Patch meets homo antecessor

Me examino el martes de prehistoria (sĆ­, otra vez, coƱazooo). Y como me he cansado de estudiar metida en la biblioteca, esta maƱana me he ido al museo arqueológico (sĆ­, ese que estĆ” enfrente de mi curro y en el que puedo oĆ­r como se levantan las momias cuando vuelvo a casa a las 10 (no porque sea un pendón desorejao, sino porque es mi hora de salida del curro, ojo)) a ver si aunque sea por proximidad a los fósiles se me pegaba algo de sabidurĆ­a. La verdad es que yo iba a ver sólo piedras y algĆŗn esqueletillo de bicho (hay que ver lo que avanzan los tiempos) y me he encontrado con que... ¡daban una charla sobre Atapuerca! (Que es justo uno de los temas que me entran a examen).

familia atapuerca
¿Los de Atapuerca se llamaban atapuercos?


La charla por supuesto llena de viejunos con sus nietos (y algún despistao que no sabe dónde se mete), pero ha estado graciosa. Una viejuna con mucha curiosidad por la vida ha empezado a preguntarle a la mujercilla-arqueóloga-no-indiana-jones que si los de Atapuerca practicaban el canibalismo y que si se sabía si era con los de su propia familia o se comían a gente de fuera de la familia. Claro, de ahí hemos empezado una charla dietética-culinaria-gastronómica a partir de datos como: que no conocían el fuego, luego se comían al personal crudo; ademÔs estÔ la cosa de quién se dejaría cazar para ser comido (incluso si fuera de tu familia); y por último estÔ el problema logístico, porque para fabricar a una persona "comible", primero hay que trincar, luego esperar nueve meses y luego lo que vendría siendo cebarlo. Pero claro, haber hecho todo eso implicaría una manera un poco "sui géneris" casi de ganadería (y cienes y cienes de años antes que en Asia).

La otra cosa que les llamó la atención a los investigadores es que entre los huesos habĆ­a un bifaz (pa entendernos, una piedra grande como una mano que estĆ” tallada en punta) sin estrenar (al que en un arranque de ingenio llamaron Excalibur) y que por lo visto lo habĆ­an llevado desde lejos (al menos el material), por lo que aĆŗn se estĆ”n preguntando quĆ© diantres hacĆ­a ahĆ­, si lo habĆ­an dejado como algo simbólico o quĆ©. Personalmente, mi teorĆ­a es que se le cayó a un homo de esos del bolsillo mientras acarreaba huesitos (tendrĆ”n los cavernĆ­colas bolsillos? y si es asĆ­, ¿serĆ”n lo suficientemente grandes como para llevar el móvil y el monedero a la vez?)...

Por cierto, al que os mole el temita, pasƔos por su pƔgina web www.atapuerca.com, en la que tienes un juego de cazar bisontes con arco mientras se cargan las diferentes partes de la web.

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